A CAPELLA Por MAURICIO HERNÁNDEZ OLAIZ - Linea de Contraste

A CAPELLA Por MAURICIO HERNÁNDEZ OLAIZ

Tlaxcala decidió.

Para la generalidad del electorado tlaxcalteca las serias omisiones en el gobierno de la 4t, los pobres resultados y la división social no fueron motivo suficiente para castigar al gobierno del presidente López Obrador. La afrenta sufrida por muchos años por Priistas y Panistas tiene todavía mayor peso en la memoria del colectivo, en una entidad que siempre ha estado de lado del político tabasqueño.

Tlaxcala es morena. Así lo decidió el electorado, que sobresalió a nivel nacional como una de las entidades que mayor participación tuvo frente a las urnas. De acuerdo con el último resultado de actualización del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), la participación de los tlaxcaltecas en la jornada electoral del domingo cerró con el 65.65%, muy por encima de la media nacional que se quedó con un 51%.

A la espera del cómputo final de los votos los de “Juntos haremos historia” obtienen el gobierno del estado, 12 ayuntamientos, los tres diputados federales y la mayoría en el congreso local. Pero en realidad los votos fueron para morena, los “aliados” PT, Verde, Nueva Alianza y PEST fueron más lastre que apoyo. Al grado de que el PEST desaparecerá del mapa electoral local, lo mismo que el verde, pero el partido del Tucán se mantendrá por ser partido nacional solo que sin recibir prerrogativas estatales y Nueva alianza está en la rayita.

Así pues el electorado en quien cree y sigue confiando es en morena. Pese a todo lo que se dijo, pese a la evidencia incontrovertible de que no son para nada diferentes a los demás. Y quién diga lo contrario miente.

Insisto, las heridas infringidas por el PRIAN aún no cierran y aún duelen entre la población.

Además quedó demostrado que la dolorosa derrota del 2018, de nada le sirvió a los partidos tradicionales. No cambiaron en nada, mantuvieron sus odiados vicios, sus mentiras, falsas promesas y ese tufo de corrupción y compadrazgo. Pese al disgusto de muchos ciudadanos por las promesas no cumplidas del régimen en el poder, PAN, PRI y PRD no supieron y no quisieron capitalizar del todo ese disgusto de un sector de la sociedad, fue esa misma la que les dio algunos votos para seguir vivos, pero sin verdadera convicción. Otros de plano le dieron una segunda oportunidad al partido guinda.

Parece que el Congreso federal ya no tendrá la mayoría calificada de los partidos en el gobierno. Una muestra de la evolución al voto razonado del electorado mexicano, sin embargo, la oposición sigue siendo muy gris, opaca, muy cuestionable. En verdad la clase política requiere de manera urgente una verdadera transformación y un líder opositor nuevo, fresco, de convicciones y sobre todo intachable.

Ya veremos si en los próximos 3 años aparece alguien así, pues de los que hay ni a quién irle. En este momento se puede decir que morena mantendrá el poder por el tiempo que quiera y mientras la oposición no se atreva a resurgir.