CÍRCULO ANALÍTICO Por ALEJANDRO FRANCISCO GUTIÉRREZ CARMONA
México dividido
Desde que llegó el presidente López Obrador a ocupar la silla presidencial, de manera inmediata se polarizó la sociedad. El presidente llegó con una actitud retadora, vengativa y culpando a los anteriores mandatarios. En cada una de sus mañaneras se dedicó a echarle la culpa de los males del país a los gobiernos corruptos. Desprestigió a las organizaciones sociales, a muchas de ellas las calumnió de una forma voraz y sin ningún argumento, por ejemplo, decía que las organizaciones estaban representadas por los intermediarios y que eran ellos los que se quedaban con los recursos públicos. Esto provocó que muchas organizaciones de la sociedad civil perdieran todo tipo de apoyos en este gobierno.
Para repartir las tarjetas el presidente decidió ocupar a su ejército de siervos de la nación, para que ahora ellos fueran sus intermediarios, la decisión de la repartición de los recursos públicos ahora está en manos de los siervos de la nación, muchas personas que desde antes ya eran simpatizantes del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA). El presidente puso a sus propios intermediarios y seguía defendiendo su decisión diciendo que los apoyos llegaban con piquete de ojo. A partir de ese momento el presidente pintó su raya y quien se atreviera a criticar su gobierno pagaría las consecuencias, tales fueron los casos de algunos periodistas como Carlos Loret de Mola y Victor Trujillo (brozo). Ellos tuvieron que despedirse de la televisión mexicana. Otro periodista que fue despedido de la televisión fue Ricardo Alemán quien ha tenido una postura más radical en contra de la 4T y ahora tiene sus espacios de opinión en las redes sociales. No sólo los periodistas han sido atacados también algunos intelectuales como los historiadores Hector Aguilar Camín y Enrique Krauze acusados de ser colaboradores de los gobiernos anteriores, ahora quienes ocupan los espacios en el ámbito cultural y televisivo son: Paco Ignacio Taibo II y John Ackerman, quienes ante la evidente falta de un verdadero proyecto de nación que le cambie la situación a los mexicanos más pobres se han reducido a ser simples porristas del presidente, no toleran la crítica y se han convertido en las plumas que hacen apologías en varios espacios públicos, no hace mucho varios intelectuales firmaron una carta criticando a este gobierno por no apoyar proyectos científicos y culturales en el país.
Algunos gobernadores han conformado un frente federalista para exigir que se haga un reparto del presupuesto federal de manera racional, esencialmente son los gobernadores del norte. Actualmente la sociedad mexicana está dividida, ya que algunos mexicanos todavía se atreven a defender al presidente a pesar de que quitó varios apoyos sociales como: PROSPERA, OPORTUNIDADES, estancias infantiles, medicinas para los niños con cáncer y actualmente la desaparición de 109 fideicomisos destinados a la investigación, cine y deporte.
Sin embargo, esta división está sostenida bajo principios subjetivos, hay mucha ignorancia para poder explicar esta división, ya que proviene de explicaciones subjetivas, algunas personas consideran que a este presidente le hace falta tiempo para que se note el cambio, lo cierto es que ya lleva más de 2 años y el país sigue sumido en una crisis económica, política y social. Otros defienden al presidente por el simple hecho de que les cae bien y de que es austero. Algunos fanáticos piensan incluso que es una divinidad, incluso algunos intelectuales han dicho que es el mesías tropical. Lo qué hay que tomar en cuenta para que el análisis sea más racional, es observar el fenómeno en sus justas dimensiones. El actual presidente no es un iluminado y mucho menos un mesías porque estaríamos cayendo en un fetichismo político encarnado en la figura del presidente. Sí uno quiere analizar la situación de esta división en el país desde el punto de vista científico y veraz estaremos haciendo un análisis más objetivo y por lo tanto cierto. El presidente fue apoyado por una fracción de la burguesía mexicana: Alfonso Romo, Ricardo Salinas Pliego, Carlos Slim, Emilio Azcárraga, etc. De forma inmediata este presidente puso como parte de su gabinete a personas que se habían desempeñado en el ámbito empresarial como: Esteban Moctezuma Barragán actual secretario de educación y quien había desempeñado un puesto de alto ejecutivo en la Fundación Azteca. Esto significa que el presidente representa a un sector de la burguesía mexicana y norteamericana, ya que en reiteradas ocasiones el presidente de México le ha externado el apoyo a Donald Trump. La verdadera división en México es entre pobres y ricos. Esta es la verdadera división que se ha tenido desde tiempos inmemoriales. La lucha de clases sigue latiendo a diario, los pobres se han multiplicado a causa de las malas decisiones de este presidente. La pregunta es: ¿Si hay muchos pobres por qué no son ellos quienes gobiernen este país? Falta que los pobres entiendan el origen científico de su pobreza y para explicárselos necesitan conocer el materialismo histórico y dialéctico a partir de esta teoría científica desarrollada por Carlos Marx. El pobre tomará conciencia de la clase social a la que pertenece y a partir de dicha conciencia podrá luchar para que cambie su destino. Sin embargo, quienes nos gobiernan son los representantes de la clase dominante y esta clase no quiere que se devele esta explicación científica y por eso la burguesía mexicana utiliza al presidente para que diga algo irracional por ejemplo que la plusvalía se explica a partir de la corrupción. Los mexicanos pobres deben organizarse y conocer su situación para poder luchar y transformar su destino si no ocurre esto seguirán siendo sometidos por la clase dominante que en este caso está representada por el gobierno de la 4T.