SIN LÍNEA Por HORACIO GONZÁLEZ
Debates y encuestas
Concluido el primer debate entre las candidatas y el candidato a la gubernatura, las redes sociales se inundaron con proclamas de triunfo. Sin embargo, por el desarrollo del encuentro, pareciera que nadie despuntó lo suficiente para asegurar que en las próximas encuestas se verán reflejados beneficios de cara a la jornada electoral del 6 de junio.
Y el próximo debate que se realizará el 16 de mayo, debido a su cercanía con el día de los comicios, ya no influirá en el electorado. Experiencias propias y ajenas indican que a dos semanas de la elección, los electores ya tienen definido por quién van a votar. En el caso de Tlaxcala, eso sucederá con el grueso del electorado.
Respecto a lo que sucedió ayer, todo indica que las dos punteras, Lorena Cuéllar Cisneros y Anabell Ávalos Zempoalteca, seguirán disputándose el triunfo. La participación este domingo del resto de las candidatas y del candidato no será suficiente para meterse a la contienda y deshacer lo que parece será una polarización entre dos fuerzas.
Y si todo sigue como hasta ahora, los estudios demoscópicos seguirán registrando no sólo el estancamiento de Lorena Cuéllar, sino la pérdida de simpatizantes y potenciales electores. Eso mismo, pero al revés, sucederá con Anabell Ávalos.
En los cuartos de guerra existen encuestas internas que evidencian que entre las dos candidatas a la gubernatura la distancia no es mayor a cinco puntos porcentuales. Es decir, ya se está dentro del margen de error que todo estudio demoscópico tiene en su elaboración.
Esa misma percepción existe entre directores de encuestas que se publican en el ámbito nacional, como se evidenció el jueves pasado en un foro organizado por el periódico El Financiero, en el que participaron Alejandro Moreno (El Financiero), Lorena Becerra (Reforma) y Roy Campos (Mitofsky).
Si esa misma tendencia continúa en las próximas semanas, la enorme ventaja que tenía el Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados se habrá esfumado, con el factor en contra de que no cuenta con la estructura operativa que tienen el gobierno estatal y la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT).
Con estos factores a considerar, habrá que ver el comportamiento que tendrán las candidatas y el candidato de cara al cierre de las campañas. En mayo de 2016 vimos la declinación de Federico Barbosa Gutiérrez a favor de Lorena Cuéllar Cisneros. En aquella ocasión la estrategia no resultó, pero eso no significa que ese mismo resultado pueda darse en esta contienda si sucede declinación a favor de alguna de las punteras.
Existen voces que advierten sobre una posible declinación de Juan Carlos Sánchez García o de Evangelina Paredes Zamora a favor de Lorena Cuéllar. Si así sucediera, irían en detrimento de ellos mismos y de sus proyectos partidistas, pues corren el riesgo de perder el registro estatal de los partidos que los postulan y, con ello, el financiamiento público que hoy reciben. Pero todo puede suceder.
Por lo pronto, habrá que reconocer que el encuentro de ayer ha resultado positivo, con todo y los cuestionamientos previos que recibió el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) por parte de un sector inconforme con la selección de los moderadores. Sin embargo, habrá que reconocer que la participación que estos últimos tuvieron debe callar tales inconformidades.