SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA - Linea de Contraste

SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA

El carnal parece que se va

A Marcelo Luis Ebrard Casaubón le han bromeado con decirle que es el “carnal” de Don Andrés, en una parodia de aquella pareja nacida en las carpas y posteriormente popularizada en el cine mexicano de la época de oro, que formaban Germán Valdez “Tintan” y Marcelo Chávez “El carnal Marcelo”, que lo mismo actuaban que cantaban o bailaban derrochando una comicidad inigualable.

En 2012, cuando en el PRD había una corriente a favor de Ebrard para hacerlo candidato a la presidencia de la República, Don Andrés, quien ya había participado en 2006, se empeñó en contender por segunda vez abanderando al partido amarillo, lo que finalmente orilló a Don Marcelo a ceder el paso.

Al término de su gestión como jefe de Gobierno, del entonces Distrito Federal, Ebrard tuvo que autoexiliarse en medio del escándalo de la línea 12 del metro, que en 2014 se descarriló por fallas en su construcción, misma línea que 7 años más tarde tendría el colapso de una de sus vías elevadas, lo que sigue manteniendo al carnal de Don Andrés en el ojo del huracán, ya que dicha línea se construyó en su mandato.

Hoy, a dieciocho meses de celebrarse la elección para suceder a López Obrador, si algo parece haberle quedado claro a Don Marcelo es que él no será el elegido por su carnal presidente, ya que este tiene puestos sus ojos de forma inquebrantable en Claudia Sheinbaum, lo que obligará a Ebrard a tomar pronto una decisión, ya que no puede esperar seis años más para ser presidente; en 2024 tendrá la edad de 65 años (nació el 10 de octubre de 1959).

Es posible que Don Marcelo sienta que su carnal no valora lo que ha hecho por él, y se sienta traicionado al no ser su favorito, y por ello ha encaminado a sus seguidores a organizarse para su campaña presidencial fuera de MORENA, específicamente como abanderado de la franquicia naranja, propiedad del inefable Dante Delgado, quien ha instruido a su hombre de mayor confianza, el aún más inefable, Pedro Jiménez León, a facilitar el ingreso masivo de “Marcelistas” a Movimiento Ciudadano.

Marcelo Ebrard, sin duda, se ha de sentir desesperado, a grado tal que parece estar dispuesto a romper con su carnal Andrés, y jugársela cobijado por uno de los personajes menos recomendables de la política nacional. ¿qué resultado podrá tener si decide competir contra el López-obradorismo? Esto es sin duda incierto, ya que una vez que deje de gozar del cobijo protector de Don Andrés, es previsible que todo aquello que se ha detenido para exonerarle de sus culpas por la línea 12 del metro, se deje correr, y termine destrozado ante la opinión pública y hasta con riesgo de ser juzgado y sentenciado.

Sin el brazo político de Don Andrés, Ebrard estará a su suerte junto a políticos abominables como los ya citados Dante y Pedro, así como por el cinismo de los tricolores encabezados por el “Alito”; los desvergonzados Chuchos del amarillo, los derechosos azules, y otras figuras tristemente célebres, que le harán muy vulnerable ante el fuego intenso que le soltarán los morenistas.

Sin embargo, a año y medio de distancia, la posibilidad de que Ebrard derrote al López-obradorismo se ve remota, requerirá que su salida del “canasto de corcholatas” de Don Andrés sea secundado por otros líderes morenos, en número tal que lleve al partido por debajo del 40% de la expectativa de votación, ya que para vencer a Don Andrés, no solo bastará una magra diferencia sobre él, sino superarlo con creces, de manera tal, que las trampas que viene preparando para el 2024 no le alcancen.