SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA - Linea de Contraste

SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA

Don Andrés y la división de poderes

 

Durante los 13 años que López Obrador fue un eterno y errante candidato a la Presidencia de la República (2005-2018), contando a partir del absurdo y nada inteligente intento de desafuero que Vicente Fox quiso montar en su contra, Don Andrés padeció, y por ello, siempre se manifestó en contra de los abusos del poder presidencialista, así como de la falta de respeto a la división de poderes que priístas y panistas cometían contra el Legislativo y Judicial, hechos que le granjearon un creciente apoyo popular al verlo como el “cordero víctima del Lobo que era el Sistema”, pero a partir del momento en que Don Andrés ganó las elecciones presidenciales en 2018, la piel del cordero se le cayó y dejó ver la que de origen ha traído.

La narrativa que la mayoría de los mexicanos le creyó a Don Andrés, construida con base en medias verdades, que también son medias mentiras, le dieron un “bono” político-electoral, no solo para ganar de forma arrolladora, sino para que a partir de su rendición de protesta el 1 de diciembre de 2018, comenzara a ejercer el mando con los mismos excesos que tricolores y azules lo hicieran durante casi nueve décadas (1929-2018), con un efecto cegador sobre sus seguidores, quienes solo escuchan lo que les quiere decir, cerrando los ojos para no apreciar los abusos que comete.

El viernes pasado, 2 de septiembre, Don Andrés cometió una de las más grandes faltas de respeto a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que la sociedad mexicana haya visto, exhibió como si fueran sus empleados desobedientes a los cuatro ministros que ha nombrado durante su mandato; no solo dejó en claro que los puso para que hicieran lo que se le antoje, sino que serán “traidores” si no votan lo relacionado con la prisión preventiva oficiosa como mediáticamente les estuvo señalando durante semanas; en el colmo de su insolente berrinche les acusó que prefieren apegarse a ley que apoyar su proyecto, “válgame Dios, que pecado más grande de esos cuatro ministros, apegarse a la ley que juraron proteger” y no a los caprichos de quien les dio la chamba, la discusión sobre la prisión preventiva, que no es menor, pasa a segundo plano.

Don Andrés utilizó el tema de la prisión preventiva oficiosa para preparar otro golpe mediático contra la Corte, en un tema que le interesa más, la Ley que incorpora la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, otra discusión relevante que lamentablemente se ha puesto a votación legislativa, a pesar de que la propuesta presidencial evidentemente confronta a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 21, por lo que, al no tener mayoría legislativa suficiente para modificarla, optó, como en el caso de la Ley Eléctrica, en sacarla vía reforma al marco secundario, donde sí le alcanza en el Congreso para imponerse. En el caso del proyecto de Ley sobre la Guardia Nacional también será presentada la acción de inconstitucionalidad para trata de revertirla en la Corte, a donde se requiere que 8 de los 11 ministros la declaren contraria a la Constitución, por ello, para Don Andrés era importante exhibir y amenazar a sus 4 ministros, para obligarlos a que sus votos impidan la mayoría calificada en la Corte.

Que Lejano quedó el López Obrador del período 2005-2018; que falsa suena su narrativa al confrontarla con sus acciones; que ridículos se ven hoy los abusos cometidos contra la división de poderes por los presidentes emanados del PRI y PAN si los contrastamos con los que perpetra Don Andrés.