CÍRCULO ANALÍTICO Por ALEJANDRO FRANCISCO GUTIÉRREZ CARMONA
Renunciando a la 4T
Un gobierno representa inestabilidad, cuando sus funcionarios han renunciado al proyecto del presidente, es decir, a la cuarta transformación. Las renuncias son síntomas de la inestabilidad política que hay en este gobierno. Los ajustes sobre la marcha representan falta de planeación. Muchos funcionarios, se dieron cuenta que ellos no tomarían las decisiones y que sólo serían simples marionetas del presidente.
La renuncia de Jaime Cárdenas al Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (Indep), se dio porque dicho funcionario observó actos de corrupción en el instituto. Alfonso Morcos Flores renunció a la dirección del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) la razón principal fue que se quería recortar el personal de 200 personas. Victor Toledo ex titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), presentó su renuncia el 31 de agosto debido a que Alfonso Romo bloqueará proyectos ambientales según la filtración de un audio. Javier Jiménez Espriú ex titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) renunció el 17 de julio por un evidente desacuerdo en que se le dieran facultades a las Fuerzas Armadas de asumir la seguridad de los puertos marítimos. Carlos Urzúa quien había estado a cargo de la Secretaría de Hacienda (SHCP), en una carta denuncia fuertes imposiciones a la Secretaría de Hacienda por medio de personas influyentes al interior de la 4T. Josefa González Blanco Ortiz Mena renunció a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales el 25 de mayo de 2019 tras un incidente con una aerolínea que la hizo esperar 40 minutos para viajar a Baja California. Germán Martínez Cázares ex titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en una carta decía que había una política de austeridad que no beneficiaba al Seguro Social. Clara Torres, quien era responsable de las Estancias Infantiles, renunció el 16 de febrero de 2019. Mara Gómez Pérez renunciaría a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV). Monica Maccise Duayhe dejaría el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), tras una polémica en un foro sobre racismo. Asa Cristina Laurell renunció a la Subsecretaria de Integración y Desarrollo de la Secretaría de Salud por no estar de acuerdo con Jorge Alcocer Varela y con Hugo López Gatell. Candelaria Ochoa dejaría la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM). Ricardo Ahued renunció a la Dirección General de Aduanas. Margarita Ríos Farjat dejaría el Servicio de Administración Tributaria. Gaspar Franco Hernández renunció a la Comisión Nacional de Hidrocarburos. Tonatiuh Guillén dejó el Instituto Nacional de Migración. Guillermo García Alcocer renunció a la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Simón Levy dejaría la Subsecretaría de Turismo. Patricia Bugarín dejaría la Subsecretaría de Seguridad. Gualberto Ramírez renunciaría a la Unidad Antisecuestros de la Subprocuraduría Especializada en Investigaciones de Delincuencia Organizada.
La lista es larga y falta que se sumen más funcionarios que pedirán su renuncia. Es lamentable observar que este gobierno no tiene un proyecto de nación y que sus propios funcionarios se han dado cuenta de lo mal que están las instituciones y de las malas decisiones que está tomando el presidente. Las renuncias a la 4T significan que este gobierno no está funcionando. Estas inconformidades las expresan sus propios funcionarios. México vive una de sus crisis más profundas y este gobierno se está esmerando en sepultar a la nación con pésimas decisiones. Es el momento de convencer a todos los sectores de la sociedad de que este gobierno no funciona. Todo es improvisación y pésimas políticas económicas en un momento donde el país necesita de políticos capacitados para enfrentar uno de los problemas más letales para la humanidad como el covid-19. Pero lo único que vemos son los caprichos del presidente al cual no le importan los mexicanos y ni siquiera sus propios funcionarios, muchas renuncias se deben al mal funcionamiento de las instituciones y a la falta de voluntad política para mejorarlas.
Los mexicanos no merecemos este tipo de gobierno, es momento de cambiar a estos políticos y optar por otros que sepan cómo contrarrestar los males que aquejan a la nación. Las próximas elecciones son una oportunidad de oro para decidir por otras corrientes políticas y poder equilibrar la balanza. Es urgente que haya un cambio porque de lo contrario seguiremos viendo el nulo desarrollo de este país. Un solo hombre por muy inteligente que se sienta estará imposibilitado de hacer un cambio trascendental en la sociedad, sin duda alguna, algunos mexicanos optaron por la peor opción política en el peor momento de la historia. Muchos de ellos pueden enderezar el camino y estar a tiempo de rescatar al país.
