SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA - Linea de Contraste

SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA

“El estilo personal de gobernar”

“El estilo personal de gobernar” (1974), es el título de una obra escrita por Daniel Cosío Villegas (1898-1976), intelectual mexicano, investigador y ensayista sobre temas económicos, sociológicos y politológicos. Cosío, escribió la obra referida como un desahogo ante la decepción que sintió respecto al presidente Luis Echeverría, de quien creyó su narrativa “democrático-populista”, y de la que se decepcionó al paso del tiempo por las contradicciones e incongruencias entre dichos y hechos.

El sexenio echeverrista estuvo marcado por una escalada de la violencia, sin dejar de lado su responsabilidad por los hechos del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco, junto a una secuela de represión y asesinato de estudiantes por parte de grupos auspiciados por el Estado en 1971 conocido como el “halconazo”, a ello siguió el activismo de la “guerrilla urbana” que justificándose en ideales de “liberación del proletariado y destrucción de la burguesía” perpetró secuestros, ejecuciones y otros actos constitutivos de delito ante la “vista gorda” del gobierno federal, lo que generó una enorme inestabilidad política al final del sexenio de Echeverría.

La historia tiende a ser cíclica, repite, con distintos actores políticos y sociales, hechos vividos en otro tiempo. La violencia del período 1968-1976 en México, engendrada por los gobiernos de Díaz Ordaz (1964-1970) y Echeverría (1970-1976), tuvo una semejanza con la etapa final del gobierno “democrático-populista” de Carlos Salinas (1988-1994), la violencia política se hizo presente de nuevo, surgió otra “guerrilla”, sobre la cual, por mucho tiempo, el gobierno federal se hizo de la “vista gorda”, así como sucedieron asesinatos políticos (Colosio Murrieta y Ruiz Massieu).

En el presente, hay visos de una tercera edición de hechos violentos que mezclan política y actividad fuera de la ley, si bien la guerra contra el crimen organizado la exacerbó Felipe Calderón (2006-2012), esta, en menor intensidad generaba una considerable cantidad de muertes violentas dolosas, al menos desde 20 años atrás.

Datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública del 18 de mayo de 2022, publicados por la empresa “TResearch Internacional” (https://www.tresearch.mx/) el 19 de mayo, datan que, el gobierno de López Obrador en 3 años, 5 meses y 18 días, superó el número de homicidios dolosos cometidos durante el sexenio de Calderón, promediando 95.3 asesinatos con dolo por día, en los 1,265 que ha gobernado, para sumar al 18 de mayo 120,584 (21 más que Calderón em 6 años), estando 35,484 por debajo de lo acumulado en el gobierno de Peña Nieto (2012-2018), lo cual, sin duda, será rebasado por López Obrador, ya que, si sostiene su promedio diario, en los 876 días que le restan de mandato, acumulará 304,067 muertes violentas dolosas, casi 28 mil más de lo sumado, por sus odiados Calderón y Peña (276,629), lo que significaría al gobierno de Don Andrés, y por mucho, como el más violento de la historia de México, marcando su estilo personal de gobernar como “La institucionalización de la violencia como forma de gobierno”.