SIN LÍNEA Por HORACIO GONZÁLEZ - Linea de Contraste

SIN LÍNEA Por HORACIO GONZÁLEZ

Activismo político en tiempos de Covid-19

 

Desde agosto de 2019, el presidente Andrés Manuel López Obrador planteó en una de sus mañaneras que fuera una encuesta el método para elegir nuevo dirigente nacional del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), tal y como se hizo para la candidatura por la Presidencia de la República en 2012.

Un año y todo un desgaste político interno tuvieron que pasar para que ese instituto político tuviera que hacerlo, pero no a propuesta de López Obrador, sino a raíz de una sentencia emitida por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en cuyo resolutivo se establece que será el Instituto Nacional Electoral (INE) el que la lleve a cabo.

Todo un año ha transcurrido y los morenistas, a regañadientes, han tenido que acatar la instrucción jurisdiccional. Por eso ahora mismo Morena vive una efervescencia política muy activa, a tal grado que 51 personas buscan la presidencia de ese partido y otras 54 la secretaría general.

Dentro de Morena se da como un hecho que esos dos cargos partidistas no son los únicos que se definirán por encuesta. Es muy posible que ese mismo método se utilice para definir las dirigencias estatales y, aún más, las candidaturas a los diferentes cargos de representación popular que ya están en disputa de cara a los comicios que se realizarán el 6 de junio de 2021.

Hace poco, en este espacio, se daba cuenta sobre el hecho de que la delegada federal Lorena Cuéllar Cisneros y su grupo político ya realizaban cabildeo para que fuera la encuesta el método de selección de la candidatura al gobierno del estado. Saben bien que la realización de uno o más estudios demoscópicos les da una ventaja, debido a lo difundida que se encuentra la imagen de la funcionaria desde hace años. El cargo que ostenta y la carrera política que ha tenido, destacando como abanderada a la gubernatura en 2018, explican el motivo por el cual se inclinan los lorenistas por la encuesta.

La posibilidad de que ese método sea el que decida candidaturas en Morena, ha hecho que desde semanas atrás los aspirantes y sus respectivos simpatizantes hayan iniciado una movilización nada menor en los 60 municipios de la entidad para buscar respaldos ciudadanos. Lo hacen a nombre propio, por supuesto, pero también a nombre de su preferido o preferida para la candidatura a la gubernatura.

Dentro de los diferentes grupos morenistas se maneja información en el sentido de que los meses de noviembre y diciembre pudieran ser importantes para la definición de candidaturas. Por eso es que ya existen visitas domiciliarias de los aspirantes.

El hecho, en sí mismo, es importante. Tal vez donde más se da el movimiento es en Morena por la probabilidad más alta de triunfo, pero también se presenta en el resto de partidos políticos. No todos quienes aspiran a un cargo de elección popular están tomando medidas para evitar el contagio del coronavirus.

Las dirigencias estatales de los partidos políticos han sostenido reuniones con el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) y el Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET), a cuyos integrantes les han expresado su preocupación por hacer respetar las medidas sanitarias respectivas para evitar incrementos en los contagios. El problema es que lo han externado en corto, en reuniones privadas, y su preocupación no se ha hecho extensiva a los aspirantes. Ningún partido político lo ha hecho público, seguramente porque hacerlo ya implica un reconocimiento de proselitismo anticipado.

Sucede en Morena en esta coyuntura de cambio de dirigencia, pero también sucede en todos los partidos en busca de posicionamientos internos de cara a la próxima definición de candidaturas. Cada quien hace su lucha y los esfuerzos son legítimos en todos los casos, sin embargo, no en todos hay conciencia y por eso se hace necesario que la autoridad estatal tome el toro por los cuernos y emita recomendaciones públicas. Las precauciones pueden evitar contagios y pérdida de vidas.

Lineazo: En la colaboración de hace una semana, este espacio dio cuenta de las reunión que el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, sostuvo con los diputados federales de Morena, en la que el funcionario adelantó que habría un recorte en el presupuesto de egresos de la federación, correspondiente al ejercicio fiscal 2021.

Por eso se alertaba que no sólo el gobierno estatal debía prepararse para tiempos difíciles, sino también los ayuntamientos, las presidencias de comunidad, los tres poderes y los órganos autónomos, entre ellos el ITE y el TET.

El Presupuesto de Egresos de la Federación plantea un recorte de 2.20 por ciento para Tlaxcala, equivalente a 468.9 millones de pesos. Ya veremos, a principios de noviembre, qué tan conscientes de la situación de crisis están las instituciones en sus respectivos proyectos presupuestales.